Prebióticos, Probióticos y Simbióticos. 25 hechos que te harán incluirlos en tu dieta diaria

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Por: Domenico Pavone

Los probióticos han sido utilizados por milenios como alimentos, demostrándose sus propiedades en la mejora de la salud de aquellos que los consumen. Sus propiedades en la mejora del balance intestinal han convertido a estos microorganismos en aliados perfectos en la prevención y cura de varias enfermedades. Lee este artículo y conoce las ventajas y posibles peligros asociados.

Prebióticos, Probióticos y Simbióticos: ¿Qué son y cómo se diferencian?

Los probióticos son microorganismos vivos que cuando son administrados en cantidades adecuadas, confieren un beneficio a la salud del hospedador. Por su parte, los prebióticos son alimentos difíciles de digerir que promueven el crecimiento y la proliferación de bacterias benéficas en el sistema digestivo. Generalmente son oligosacáridos y polisacáridos distintos al almidón. Finalmente, los simbióticos son productos que contienen tanto prebióticos como probióticos que trabajan juntos de forma sinérgica y aportan beneficios a la salud.

Así, los simbióticos influyen sobre el ecosistema microbiano del intestino fomentando el crecimiento de bacterias benéficas y disminuyendo las poblaciones de potenciales patógenos.

Los probióticos impactan sobre los mecanismos inmunes de la mucosa, generando productos terminales como ácidos grasos de cadena corta y comunicándose con las células del hospedador a través de señales químicas.

 Estos mecanismos refuerzan la barrera intestinal, disminuyen la inflamación y aumentan la respuesta inmune. Se piensa que estos fenómenos median en la mayoría de los efectos benéficos, incluyendo la reducción de la incidencia y severidad de la diarrea, uno de los usos más reconocidos de los probióticos.

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Los probióticos son muy demandados en la alimentación de varias partes del mundo.

 

Tipos de prebióticos y dónde encontrarlos.

Cualquier cosa con carbohidratos puede ser un prebiótico. Algunos prebióticos conocidos son: oligofructosa, inulina, galacto-oligosacaridos, lactulosa, oligosacáridos de la leche materna, entre muchos otros. Los fructooligosacáridos (FOS), un subgrupo de la inulina, también son prebióticos y con frecuencia se agregan a los productos lácteos y productos horneados. Mejora el sabor y estimula el crecimiento de las bacterias beneficiosas como las bifidobacterias.

 La inulina es encontrada en muchas plantas como hierbas, raíz de achicoria, raíz de bardana y raíz de diente de león. Se encuentran en frutas, como manzanas, plátanos; en verduras dulces, cebollas, ajo, espárragos, puerros y alcachofas. También puede encontrase en el vinagre de sidra de manzana cruda y leche materna para bebés.

Beneficios del consumo de probióticos.

La lista de beneficios de los probióticos es muy larga. Aquí te diremos algunas de ellas.

 1.- Estimulan al sistema inmune activando a los macrófagos, linfocitos B y la secreción de inmunmglobulina A (IgA) de forma local y sistémica. También Modulan los perfiles de citoquinas.  Inducen la tolerancia a antígenos alimentarios.

 Impulsan las células blancas de la sangre y las células T killer. Pueden mejorar la respuesta del cuerpo a las vacunas. Los niños que comen yogurt con inulina tienden a tener menos ausencia a la escuela por fiebre y toman menos antibióticos.

2.- Digieren alimentos y compiten por nutrientes con los patógenos. Alteran el pH local y crean un ambiente desfavorable a los patógenos.

3.- Producen bacteriocinas para inhibir a los patógenos.

4.- Disminuyen los radicales superoxidos.

5.- Estimulan la producción de mucina en el epitelio.

6.- Acrecienta la función de barrera intestinal.

7.- Modifica las toxinas producidas por patógenos.

8.- Ayudan a absorber iones como calcio, hierro y magnesio.

9.- Mejora los niveles de glucosa en sangre en pacientes con diabetes.

10.- Moderan los niveles de colesterol y triglicéridos.

11.- La inulina puede reducir la arteriosclerosis o endurecimiento de las arterias.

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La inulina es uno de los prebióticos más utilizados. Imagen original de Pocicultura.

 

12.- Se han usado para tratar el síndrome del colon irritable y la enfermedad de Crohn.

13.- Pueden ser útiles como coadyuvantes en el tratamiento del cáncer, osteoporosis y diabetes.

14.- Aumenta la defecación y disminuye el estreñimiento.

15.- Reduce los efectos de la infección por Candida.

16.- Disminuye los microorganismos causantes de caries dentales en la boca.

17.- Coadyuvan en la cura infecciones por levaduras vaginales e infecciones del tracto urinario.

18.- Previene la diarrea luego tratamientos con antibióticos.

19.- Previene la diarrea causada por virus o Salmonella.

20.- Fortalece al sistema inmune para combatir alergias.

21.- Reduce la cantidad de sustancias cancerígenas en el intestino.

22.- Ayuda a modular el proceso de envejecimiento y luce prometedor para mejorar la salud de adultos mayores.

23.- Algunos estudios clínicos han demostrado la eficacia de los probióticos como adyuvante en el tratamiento de Helicobacter pylori con antibióticos.

24.- Prebióticos como la lactulosa son comúnmente usados en la prevención y tratamiento de la encefalopatía hepática.

25.- Streptococcus thermophilus y Lactobacillus delbrueckii pueden mejorar la digestión de la lactosa y reducir los síntomas de la intolerancia a la misma.

Alimentos con probióticos

Muchos alimentos especialmente los fermentados poseen gran variedad de microorganismos beneficos para la salud. Entre ellos tenemos: Miso, queso, kéfir, chukrut, pepinillos, chocolate, tofu, tempeh, entre muchos otros.

Los compuestos fenólicos del té verde son metabolizados rápidamente en ácidos fenilcarboxilicos por los microorganismos del intestino. Este proceso es un poco más lento con el té negro. Estos compuestos fenólicos tiene el potencial de ser considerados como prebióticos por actuar de forma análoga a los oligosacáridos prebióticos.

 ¿Los probióticos son seguros?

La evidencia científica confirma que de forma general si lo son, aunque hay casos aislados de infecciones producidas por algunas de estas bacterias en pacientes inmunocomprometidos o con enfermedades como úlceras, entre otras. A pesar de ello, es abrumadora la evidencia de los beneficios de los prebióticos y probióticos en personas sanas. Se recomienda para productos médicos con base en estos microorganismos, hacer estudios exhaustivos para asegurar su inocuidad.

Luego de revisar las bondades y desventajas de los probióticos y con casi 2000 estudios clínicos acerca de estos organismos, se ha acumulado evidencia a lo largo de los años que soportan la idea de lo beneficiosos que son los probióticos para la salud de los humanos y animales.

Después de leer el artículo, ¿Vas a incorporar a los probióticos en tu dieta diaria?

¡Te leemos en los comentarios!

Domenico Pavone. dfpavoneuc@gmail.com. Biólogo y especialista en Biotecnología y Microbiología. 18 años como profesor universitario y autor de artículos científicos en varias áreas de la biotecnología.

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